Las raíces son posiblemente la parte menos estudiada de la planta de café, además, no reciben similar atención a la brindada a la parte área a pesar de que su función es vital para la absorción de agua y nutrientes para la planta.

El daño al sistema radical según el grado de severidad en que este ocurra, puede limitar muy significativamente el desarrollo de la planta de café desde sus primeras etapas de crecimiento, más adelante en cualquier momento de su etapa productiva al provocar rápido deterioro e inclusive la muerte de los cafetos.

Semilleros y almacigales

En el semillero los principales problemas se pueden dar por la falta de aireación adecuada del sustrato debido al tipo de material utilizado o la aplicación excesiva de riego.

Este problema se previene utilizando suelo bien suelto y drenado (inclusive arena), manteniendo buena humedad, pero no excesiva y seleccionando para el transplante, únicamente las plántulas de tallo recto y sano.

En el almacigal el sistema radical puede verse afectado por el uso de bolsas muy pequeñas que en determinado momento se constituyen en una barrera que impide el desarrollo normal de las raíces que provoca que éstas se comiencen a “arrollar” dentro de la bolsa. Asimismo, una mala colocación del manquito con la raíz doblada o la siembra muy profunda de éste va a limitar el desarrollo adecuado y la obtención de una planta de buena calidad.

El uso de un tamaño de bolsa adecuado (15 x 20 cm o 20 x 22,5 cm) dependiendo si el periodo del almacigal (vivero) es de 6 a 9 meses, previene problemas de “arrollamiento” de las raíces. Por su parte, el personal seleccionado para llevar cabo el manejo del almacigal desde la siembra, debe ser el más idóneo.   

Plántulas desarrolladas por embriogénesis somática

Malformaciones de las raíces desde las primeras etapas de desarrollo en condiciones de laboratorio para la producción de híbridos F1 por el método de embriogénesis somática, han tenido posteriormente efectos muy perjudiciales desde de los primeros años de cosecha de las plantas en el campo. Los principales síntomas de estos problemas:un sistema radical anormal o deformado, “mallamiento”, volcamiento y muerte de una cantidad importante de las plantas.

Este problema tiene pocas probabilidades de poder ser corregido por los productores en campo, más bien requiere de procedimientos más rigurosos de control de calidad en cuanto a la condición normal que deben presentar las raíces de las plántulas que pasan del laboratorio a las bandejas durante la llamada etapa de “endurecimiento, previo a su desarrollo en vivero.

Un procedimiento alternativo de desarrollo de estaquillas a partir del material proveniente de las plantas madre y siempre utilizando procedimientos de multiplicación en laboratorio, está resultando muy exitoso comercialmente para evitar los problemas del sistema radical característicos en híbridos F1 desarrollados por embriogénesis somática.

Características físicas del suelo

Las condiciones físicas del suelo donde se establecen las plantas de manera definitiva, pueden limitar el desarrollo del sistema radical, causar “paloteo” y agotamiento prematuro de las plantas. Estos problemas son más frecuentes en áreas de cultivo con suelos arcillosos y compactados, cuando no se realizan las labores adecuadas para mejorar las condiciones donde se estarán estableciendo las plantas de manera definitiva.

Para prevenir estos problemas, al momento de la siembra se deben construir hoyos de dimensiones suficientes que permitan el desarrollo del sistema radical sin obstáculos, al menos durante los primeros 18 meses después de la siembra cuando ya el sistema radical está más desarrollado y consolidado.

Actualmente existen en el mercado las máquinas ahoyadoras para tierra que disponen de diferentes brocas adaptables de acuerdo con la dimensión del hoyo que se quiera construir y que brindan muy buen desempeño para trabajar en suelos de textura arcillosa. Si la opción es realizar los hoyos en forma manual con pala o palín, el agricultor debe asegurarse que éstos sean formados para alcanzar las dimensiones adecuadas.

Ataque de enfermedades y plagas

Los problemas se pueden presentar en cualquier etapa de su vida útil, sin embargo, es durante los dos primeros años de desarrollo de las plantas o años después en cafetales que han cumplido muchos ciclos productivos, cuando los cafetos se tornan más sensibles al ataque de hongos y plagas insectiles.

Enfermedades como pudriciones del tallo causadas por hongos habitantes del suelo o debilitamiento de las plantas causado por plagas de insectos que cortan y/o dañan el sistema radical, pueden provocar pérdidas muy importantes por muerte de plantas y necesidad de compra de almácigo para resembrar.

Se debe llevar a cabo un control preventivo de plagas al momento de la siembra con algún producto insecticida/nematicida. En caso de antecedente de problemas con llagas en troncos arrancados para renovación, se debe realizar una desinfección previa del suelo en los sitios que fueron afectados y sacar del cafetal el remanente de todas las plantas afectadas.

En el caso de cafetos que han cumplido varios ciclos productivos, normalmente los síntomas del ataque de plagas y enfermedades se manifiestan cuando el daño ya se encuentra en un estado muy avanzado y resulta muy difícil de controlar. En esta situación es preferible arrancar las plantas afectadas y realizar las resiembras correspondientes previo la aplicación de tratamientos de desinfección del suelo.