Comunicaciones Técnicas de Café

Número 149 - Noviembre 2022

Ramírez Caficultura desde Costa Rica

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En Centroamérica se debe acelerar el proceso de cambio de variedades  susceptibles por variedades con resistencia a la roya del cafeto

Ing. Jorge Ramírez Rojas
Consultor Experto en Café

Región del mundo con un clima muy favorable para la roya

 Es muy importante tener presente que, comparativamente con la situación que ocurre en otras partes del mundo, Centroamérica es una de las regiones que presentan condiciones climáticas (efecto combinado de temperatura y precipitación) más propicias para el desarrollo y ataque severo de la roya del cafeto.

 Además, los efectos del cambio climático han venido generando ambiente sumamente favorable para una mayor incidencia y severidad en los ataques de la roya, cuyo primer llamado de atención realmente serio lo dio la epifitia del 2012 que causó cuantiosas pérdidas para los caficultores y para la producción de los países.

 

Roya principal problema fitosanitario del cultivo en la región

 Las pérdidas causadas por la roya son constantes año con año en Centroamérica, en gran parte debido a que las áreas sembradas de variedades con resistencia o tolerancia a la roya están todavía muy lejos de cubrir una superficie realmente importante y significativa con respecto al total de café sembrado en la región.

 Tomando en cuenta que el parque cafetalero de la región de Centroamérica es cercano a las 900 mil hectáreas, se puede estimar que al menos el 75% del café que se cultiva en la región todavía corresponde a variedades susceptibles a la roya. En estas condiciones la roya sigue haciendo estragos en la mayor parte de los cafetales y su efecto perjudicial lejos de disminuir, cada vez se manifiesta con mayor agresividad y daño económico.

 Esta situación señala la clara necesidad de acelerar el proceso de cambio de variedades, donde los institutos de café deben cumplir un rol fundamental para promover y facilitar de manera mucho más decidida y práctica de lo que se ha venido haciendo hasta ahora, la siembra de materiales con resistencia a la roya.

 Conviene emplear todos los medios apropiados disponibles para explicar de manera amplia y detallada a los productores de café, cómo las condiciones ecológicas y la variación climática que prevalecen en nuestra región favorecen enormemente el ataque de la roya, y que, una de las principales estrategias de control precisamente consiste en utilizar variedades con resistencia o tolerancia a la roya.

 

Amplia disponibilidad de variedades con resistencia a la roya

 Afortunadamente en la región de Centroamérica se dispone de una cantidad importante de variedades con resistencia o tolerancia a la roya que además presentan muy buenas características agronómicas y organolépticas.

 Esto ha sido el resultado de la selección de materiales genéticos realizadas por los países con apoyo de organismos internacionales con sede en la región, además de la introducción de nuevas variedades provenientes de Brasil que han sido sometidas a procesos de validación regional con muy buenos resultados en cuanto a comportamiento agronómico, calidad de taza y resistencia o tolerancia a la roya.

 Como referencia del proceso de liberación paulatina de variedades con resistencia a la roya que se ha dado con respaldo de los institutos de café en la región de Centroamérica en los últimos 30 años, se pueden citar primero variedades del grupo de los Catimores como Catisic, Costa Rica-95, T-5175, IHCAFE-90 y Lempira. Después fueron liberadas variedades del grupo de los Sarchimores tales como Parainema y Cuscatleco. Más adelante los Híbridos F1 Centroamericano y Milenio, y recientemente variedades introducidas de Brasil como Obatá, Tupi, Catiguá y Paraíso, entre otras.

 

Áreas de cultivo de cafés especiales con variedades susceptibles a la roya

 En la región de Centroamérica algunos caficultores han logrado posesionar su producto en nichos de mercado de cafés especiales mediante el cultivo de variedades que presentan cualidades de taza muy sobresalientes que se logran expresar plenamente gracias a que se encuentran en condiciones ecológicas idóneas para el cultivo y en fincas donde se utilizan cuidadosos procesos de manejo agronómico y postcosecha.

 Por lo general se trata de lotes pequeños sembrados de variedades como Geisha, Pacamara, Bourbon, SL-28 entre otras, todas susceptibles a la roya pero a la vez muy apreciadas por selectos mercados que otorgan premios y/o diferenciales que aportan un valor agregado muy alto que permite compensar la baja productividad que presentan estas, respecto a las variedades mejoradas.

 Las áreas sembradas con cafés especiales constituyen un porcentaje muy bajo del total del área cafetalera de la región, las cuales se pueden manejar con un control eficiente de la roya y que conviene mantener para beneficio de los productores que con esfuerzo y dedicación han logrado consolidarse de esta forma en el negocio del café.