Notas Informativas de Café

Número 77 - Mayo 2021

Ramírez Caficultura desde Costa Rica

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Aclaración científica del Instituto Agronómico de Campinas (IAC)
en relación con el potencial de la especie Coffea stenophylla

Se ha informado en diversos medios que la especie Coffea stenophylla tendría el potencial de “garantizar el futuro de la producción de café” ante el cambio climático. Dicha información se extrajo de algunos artículos publicados que indican que la especie puede tener tolerancia al calor, además de presentar "buena calidad de bebida, similar al café Arábica".

Sin embargo, se observa que estos artículos abordan mucho más el tema de la adaptación de la especie en diferentes localizaciones y la calidad de la bebida, que la tolerancia adecuada a las altas temperaturas, ya que no se ha realizado ningún estudio específico al respecto. Por lo tanto, quisiéramos agregar alguna información para estimular el debate sobre el tema.

La especie Coffea stenophylla es originaria de África Occidental (Costa de Marfil y Sierra Leona) y fue introducida en Brasil en 1953, pasando a formar parte del Banco de Germoplasma de Café del Instituto Agronómico de Campinas (IAC), donde se conserva en la actualidad.

Desde entonces, se han realizado innumerables estudios con la especie, tanto desde el punto de vista genético como de la posibilidad de uso agronómico, pero nunca hubo atributos que realmente llamaran la atención sobre el uso en mejoramiento genético. Se sabe que la especie tiene una alta tolerancia al minador de la hoja y es susceptible a la roya naranja, y no hay duda de que la existencia de tolerancia al calor y/o la sequía sería muy bienvenida para su uso futuro en el cultivo del café, pero todavía se necesitan estudios específicos sobre fisiología y fenología de las plantas.

C. stenophylla es una especie diploide que, en las condiciones de Campinas-SP, tiene muy baja productividad, granos de tamiz bajo (menos de 15), grandes cantidades de granos de moca y frutos dañados (alrededor del 50% en accesiones IAC). Por lo tanto, cualquier iniciativa de mejoramiento genético debe incluir cruces interespecíficos, retrocruces y selección de genotipos superiores, que pueden requerir al menos 20 años de mejoramiento para obtener algún material de interés comercial compatible con la realidad del café brasileño. Este sería el plazo para lograr la “domesticación mínima de la especie” mencionada en la literatura.

En las valoraciones cualitativas citadas en los artículos publicados, se observa que la especie Coffea stenophylla tuvo una puntuación de 80,25 puntos en la escala de la Asociación de Cafés Especiales (SCA) y algunas características sensoriales similares al café arábica. A pesar de estar clasificado como un café especial, es una calidad básica, sin grandes atributos sensoriales (lo ideal sería por encima de los 84 puntos).

Cabe mencionar también que algunas muestras analizadas contenían solo 70 gramos de fruta madura, que luego de secado y procesado no fue suficiente ni siquiera para aplicar el protocolo de evaluación SCA, siendo necesario reducir la cantidad de tazas, de 5 a 3 solamente. Considerando que la calidad de la bebida de café es un fenotipo, que por lo tanto depende de la interacción Genotipo x Ambiente.

Se observa que existe una gran preocupación por encontrar cafés con una calidad similar al café Arábica. Sin embargo, con el actual desarrollo y expansión de los mercados de cafés especiales, puede ser una mejor estrategia invertir en valorar la calidad intrínseca de cada especie, reconociendo la importancia de cada una y aprovechando sus mejores atributos naturales para cumplir con los requerimientos del país. mercado cafetero diferenciado, con posibilidad de agregar valor.

Evidentemente, es preocupante un escenario de calentamiento global con efectos negativos directos sobre el cultivo del café. Sin embargo, se infiere que se pueden realizar avances tecnológicos para mitigar ciertos factores abióticos en proporción a los problemas ocasionados por el probable cambio climático. Existen varias medidas paliativas que pueden contribuir a la mejora de los sistemas de producción de café, mitigando algunos efectos climáticos indeseables. Por lo tanto, las prácticas de manejo de cultivos integradas con el mejoramiento genético serán muy demandadas en algún momento.

Fuente: Gerson Silva Giomo - Investigador científico, Instituto Agronómico de Campinas