El fruto pequeño de café después de la floración está expuesto a la influencia de factores que pueden resultar favorables o no para alcanzar un buen “cuajamiento”. Varios de estos factores están relacionados con aspectos climáticos, en particular la precipitación.

 La primera etapa del proceso de fructificación se extiende hasta la semana 7 después de la floración, este es un periodo durante el cual ocurre muy poco crecimiento del fruto en peso y volumen. En esta condición la ausencia de lluvias no compromete el buen estado del fruto, es decir, un tiempo seco después de la floración no constituye factor de riesgo para la producción potencial del cafeto.

 Sin embargo, a partir de la semana 8 después de la floración, el fruto requiere agua para asegurar el cuaje e iniciar la etapa de crecimiento acelerado que corresponde al avance normal del proceso de fructificación. En este caso, si la condición seca del ambiente se prolonga más allá de lo esperado, los pequeños frutos comienzan a mostrar un deterioro gradual cuya severidad y daño va a depender de la prolongación del déficit hídrico y de la magnitud del evento de floración correspondiente a ese estado de desarrollo de los frutos.

 De esta forma, en las regiones cafetaleras que son afectadas por periodos prolongados de sequía posterior a los eventos de floración, se puede observar el daño causado por el factor climático adverso sobre los frutos tiernos de café. Inicialmente se nota una pérdida del color verde natural de estos frutos, seguida de un ennegrecimiento progresivo del tejido que pierde su capacidad de retomar el crecimiento normal y termina con secamiento y caída del fruto.

 Para todas las fincas sin posibilidades de riego, el efecto negativo debido a insuficiente disponibilidad de agua a partir de la semana 7 después de la floración resulta irreversible y se debe asumir como pérdida potencial de cosecha puesto que no es un problema que se pueda corregir con aplicación de productos foliares. Cabe señalar que, las fincas manejadas con porcentajes apropiados de sombrío (35-45%) van a presentar mayor resiliencia al impacto de factores climáticos adversos como son los periodos prolongados de sequía..